El afán de Leonora por exigir la reivindicación del género femenino, su oposición frente a las estructuras tradicionales y su preocupación por la relación del ser humano con la naturaleza, encontraron en el leguaje surrealista un espacio para la experimentación que le permitió externar su visión ante los temas que ocuparon la mente de la artista a lo largo de su existencia.
Leonora encontró en México un campo fértil para su producción artística y dio rienda suelta a su imaginación, surgieron ideas, inquietudes, amistades y charlas, que culminaron en pinturas, esculturas y proyectos. Su activa participación desde 1936 en las exposiciones surrealistas fueron el inicio de una presencia constante en el movimiento que se prolongó a lo largo del tiempo y recorrió numerosos países.
De las inquietudes de Leonora que dieron pie a conversaciones con amigos y desconocidos, sobresale su interés en la reivindicación de las mujeres, muestra de ello son las exposiciones en las que desde 1955 forma parte. Podemos citar algunos ejemplos como “Seis pintoras” en la Galería Diana y Galería El Eco en la ciudad de México, en 1958 se presentó en el “Primer Salón de la Plástica Femenina” en Galerías Excelsior. En 1960 participa con la Mexican Art Gallery de San Antonio, Texas en “Mujeres que pintan en México”. El Museo de Arte Moderno (MAM) del Instituto Nacional de Bellas Artes presentó en 1967 “Frida Kahlo acompañada de siete pintoras” junto a Leonora encontramos a Cordelia Urueta, Olga Costa, Remedios Varo, Alice Rahon y Sofía Bassi, algunas de ellas amigas cercanas con quienes Leonora compartió sus intereses y afinidad con el arte y el movimiento surrealista y que de manera constante aparecen en otras muestras con características similares.
A partir de 1970 se genera un mayor interés sobre el tema, que además de exposiciones como “La mujer como creadora y tema del arte”, presentada en el MAM en 1975, tienen lugar otras actividades. El I Simposio Mexicano-Centroamericano de Investigación sobre la Mujer, en el Museo de Arte Alvar y Carmen T. de Carrillo Gil en 1977, por ejemplo. El interés se dispersó al interior de la República, el Museo de Bellas Artes de Toluca ofreció en 1984 “Mujeres Artistas. Artistas Mujeres”, donde participaron 63 artistas. Entre 1990 y 1991 la National Academy of Design, Centro Cultural/Arte Contemporáneo y el Museo de Monterrey mostraron al público “La mujer en México, women in México”. Leonora, participó en conferencias como la que dictó en febrero de 1984 en el marco de la exposición “Mujer-creación”, de la Galería de San Francisco del Salón de la Pástica Mexicana, por el año internacional de la mujer. Tras la muerte de Leonora su obra continua formando parte de importantes muestras que tienen como tema central la producción artística del género femenino, “In Wonderland: Mujeres Surrealistas en México y los Estados Unidos” exhibida en el MAM en 2013 es una de ellas. San Luis Potosí no es la excepción, en 2020 el Museo Francisco Cossío (MFC) presentó en el marco de su 50 aniversario la exposición “Artistas. Mujeres presentes a lo largo de 50 años en el MFC” muestra en la que se plantea una reflexión respecto a la presencia de las mujeres en el arte, un panorama de 200 años en la colección del museo, en donde las obras de Leonora están presentes.
En la mente de Leonora se cocinaron muchos de estos proyectos y argumentos que dieron cabida a los postulados que viven en su obra y se han mostrado en estas exposiciones. Su personalidad inquieta, emprendedora y vanguardista la llevó a experimentar en la escultura, la pintura, la literatura, los textiles o la escenografía, manifestaciones que nos comparten vivencias, anhelos, pasiones, ambiciones y sueños materializados que dejó como una invitación abierta para reflexionar sobre los temas que la inquietaron a lo largo de su existencia.
Fuentes consultadas
Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas (CENIDIAP), Fondo documental de autor “Leonora Carrington”, Vol. 4. Catálogos de Exposición.
“Exposición Plástica y Charlas Sobre la Mujer y su Creación”, en Excelsior, Sección Cultural, p. 2, 19 de febrero de 1984.
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