Las mujeres llegan al arte urbano, y lo hacen con fuerza.
La escena del arte urbano o grafiti es un trabajo que, debido a su auge, se ha convertido de una actividad ilegal a ser legal y ha sido dominada con la presencia masculina. Por ello, es doblemente relevante resaltar el trabajo de una mujer en este ámbito. Primero, por ser un trabajo que no siempre es valorado al relacionarse con el vandalismo de las calles. Y segundo, que por el hecho de ser mujer se vuelve más difícil tener presencia para reflejar su visión de la sociedad.
A través del reportaje realizado desde el proyecto cultural de Café a las Doce de las exposiciones de “Neomuralismo San Luis Potosí” y “Street Art” en el Museo de Arte Contemporáneo de San Luis Potosí, charlarmos con las artistas Janín Garcín y Feym, ambas seleccionadas para dar un discurso inaugural en representación de los artistas que expusieron en estas dos exhibiciones.
Es importante darle visibilidad y tomar en cuenta este tipo de trabajos que se realizan desde hace años y donde ahora se puede conjuntar el estilo de cada artista en esta exposición, así lo menciona Janín. El arte urbano refleja lo que sucede en las calles; es un medio de comunicación potente al estar dentro del espacio público. Concuerda con las palabras de Feym: todos debemos de tener acceso tanto para realizar como para apreciar el arte. El grafiti es una herramienta de expresión, un deliete visual que brinda color a las calles, una forma de decir aquí estamos. Lo que para unos es considerado vandalismo, para otros es visto como arte.
Para Feym, fue una grata sorpresa el participar en la primera exposición dedicada al grafiti en la ciudad, además de ser un orgullo representar a la mujer en este tipo de arte. Desde hace cinco años ha habido un crecimiento en la ciudad en cuanto a la presencia de la mujer ya que, gracias a la globalización, se ha hecho más visible el tener un lugar dentro de la escena del grafiti y, aunque más desarrollada en otros países, las mexicanas no se quieren quedar atrás y siguen realizándose nuevos trabajos en la ciudad.
El mural realizado por Janín, habla acerca del empoderamiento femenino, del territorio, lo que somos y, especialmente, de la identidad de las mujeres latinoamericanas. Utiliza elementos como la chica que esta danzando, la libertad, la naturaleza y, sobre todo, “el hacernos visibles en espacios donde no lo éramos”; y el hacerlo en un espacio como un museo, reafirma que se refleje de esa forma, así lo atestigua la artista. El realizar propuestas como estas le da valor a las manifestaciones que son estigmatizadas por la sociedad y que solo se pueden ver en las periferias de la ciudad; el hecho de que estén más cerca, en este caso en esta galería que todos puedan ocupar, da la oportunidad de conocer nuevos discursos de los artistas visuales.
El grafiti de Feym cuenta con la presencia de letras que se adaptan a la textura de la pieza previa, tomando como referencia la gama de color que ya tenía el mural para hacer una nueva propuesta agregando elementos con la técnica 3D. El tema es alusivo a la muerte y el caos que este puede causar, retomando el discurso que tenía el mural previo que fue intervenido por ella.
Para Feym, el ser artista viene de la mano con ser fundadora de un crew o cuadrilla femenina de la cultura hip-hop, en la cual se realizan diferentes tipos de actividades. De aquí, ella aprendió que todos tenemos las mismas habilidades, por lo que es importante buscar un espacio de equidad en este tipo de manifestaciones para desarrollarlas mejor. Cabe recalcar que cada uno tiene una percepción distinta por el simple hecho de ser humano y no necesariamente por el sexo al que perteneces.
Dos casos distintos de mujeres que gracias a su dedicación, profesionalismo y perseverancia han logrado con éxito ganarse su espacio en este arte. Debemos de hacer más visibles perfiles como estos en la sociedad y esperemos seguir mostrando más en un futuro.
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